"Uno de nuestros objetivos es impulsar el trabajo en equipo y mejorar el diálogo entre la supervisión y el personal operativo. Y creo que la capacitación fue muy buena al respecto. Tengo 63 años de edad y llevo más de 30 al frente de grupos de trabajo, y realmente fue una satisfacción poder participar de esta actividad. En cuanto a la aplicación, como todo cambio cultural lleva su tiempo y no es fácil, pero tampoco es imposible", sostiene Juan José Viglietti, supervisor de control de calidad de la fabricante de secadoras de granos Ingeniería Mega.
Con su asistencia al curso "El supervisor como coach" -realizado el 19 de setiembre pasado en las propias instalaciones de la pyme, ubicadas en el Parque Industrial de Lincoln, en plena pampa húmeda bonaerense-, Viglietti se transformó nada menos que en la persona número 1.000 capacitada mediante el Programa de Desarrollo ProPymes, desde que se iniciaron estas iniciativas de formación hace sólo siete meses.
"Buscamos complementar, desde el eje formativo, el cambio que están realizando las pymes, en términos de mejora de su gestión mediante el rediseño de procesos, las innovaciones e inversiones. De hecho, los contenidos de los cursos están armados de modo tal que la formación para diferentes niveles esté alineada entre sí y contribuya a generar un lenguaje común y compartido. Esto aporta directamente a la mejora, desde las competencias mismas de las personas", indica la coordinadora de capacitación del Programa ProPymes, María Laura García.
En total, en el marco del Programa de Desarrollo ProPymes ya se han realizado: un programa para directores y gerentes (diseñado en conjunto con el IAE, la escuela de negocios de la Universidad Austral) que contó con 65 inscriptos; 81 cursos para supervisores y mandos medios, con la participación de 769 personas; otros 16 cursos para operadores y técnicos, con 169 asistentes. Aunque algunos de los cursos se efectuaron en la planta de Ternium Siderar en San Nicolás, la mayoría siguió la modalidad "in company", tratando de que las personas construyan nuevos conocimientos y habilidades sobre sus fortalezas. La modalidad de dictado es idéntica a la aplicada internamente en el Grupo Techint, con los mismos instructores y materiales.
Los temas incluyeron distintos abordajes sobre las gestiones de recursos humanos, calidad y seguridad industrial, entre los más demandados por las propias pymes, junto con otros aspectos complementarios, del estilo de la planificación del trabajo, los indicadores, la comunicación escrita, la organización de reuniones o las herramientas para la resolución de problemas. Estas últimas, de hecho, fueron el motivo del curso inaugural, el 21 y 22 de febrero pasado, en la unidad productiva de conjuntos para carrocerías de MI-PA-MET, en el partido de San Martín, corazón del conurbano.
Para otra de las participantes, la autopartista Taranto, los cursos también resultaron una oportunidad. "Nuestro objetivo es mejorar la satisfacción del personal y por eso consideramos que 41 de nuestros mandos medios y altos debían reforzar sus habilidades de liderazgo y comunicación", explica Brenda Mac Lennan, su gerenta de Recursos Humanos. "Creo que la elección fue acertada. En una encuesta de feedback que llevamos a cabo, el 97 por ciento de los asistentes se mostró altamente satisfecho", añade la ejecutiva de la firma sanjuanina. Cabe destacar que el plan de Jóvenes Profesionales de Taranto también tiene el asesoramiento del Programa ProPymes.
Esa cifra coincide con las mediciones propias de la iniciativa del Grupo Techint. De hecho, el promedio de satisfacción de los asistentes da 4,5 sobre un máximo de 5 en el caso de los supervisores y operarios. Y lo propio ocurre con el 6,4, de un máximo de 7, logrado con los directores y gerentes. "La idea del presidente de nuestra empresa es que la capacitación del personal sea sistemática y continua. Por lo tanto, la iniciativa del Programa ProPymes es fundamental", completa en ese sentido Mario Ressia, gerente de Personal de Ingeniería Mega.